Expresidente de la Federación Española de Fútbol enfrenta cargos por agresión sexual y coacción

Este lunes inicia en España el juicio contra Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, por el beso no consentido que dio a la jugadora Jenni Hermoso durante las celebraciones del título mundial femenino en 2023. La acción, ocurrida en plena transmisión internacional, generó una ola de indignación social y marcó un punto de quiebre en el fútbol español.

El caso ha evolucionado hasta convertirse en un proceso judicial sin precedentes en el deporte europeo. Rubiales está acusado de agresión sexual y coacción, tras lo que un juez calificó como un acto “unilateral y sorpresivo”. Si es hallado culpable, podría enfrentar entre uno y cuatro años de prisión.

Contexto del escándalo
El beso en cuestión tuvo lugar tras la victoria de España sobre Inglaterra en la final del Mundial Femenino. Hermoso denunció que el gesto fue sin su consentimiento, lo que desató protestas en todo el país, impulsó campañas feministas y llevó al expresidente a renunciar, no sin antes alegar que era víctima de una “caza de brujas”.

Además del beso, Rubiales protagonizó otro episodio controversial al hacer un gesto obsceno (tocarse la entrepierna) cerca de la reina Letizia y la princesa Sofía. La FIFA lo sancionó con tres años de inhabilitación, y la justicia española lo declaró no apto para cargos públicos deportivos por igual período.

Coacción y presión interna
El juicio también involucra a tres exfuncionarios de la federación: Jorge Vilda, exseleccionador femenino; Albert Luque, exdirector deportivo del equipo masculino; y Rubén Rivera, exjefe de marketing. Los tres están acusados de haber intentado forzar a Hermoso a respaldar públicamente a Rubiales mediante presiones tanto a ella como a su hermano. Todos han negado los hechos.

Los fiscales, Hermoso y la Asociación de Futbolistas Españoles solicitan una condena de dos años y medio de prisión para Rubiales y un año y medio para los otros tres acusados, además de una indemnización de 50,000 euros y la prohibición de que Rubiales vuelva a trabajar en el deporte.

Testigos clave y clima de tensión
Hermoso testificará el primer día del juicio, y se espera que lo hagan también compañeras de equipo como Alexia Putellas, así como el seleccionador masculino Luis de la Fuente. Rubiales solo está obligado a asistir el primer y el último día del proceso, que podría extenderse por más de 10 jornadas.

El escándalo provocó un boicot temporal de la selección femenina, que se negó a jugar bajo la dirección de Rubiales. Solo regresaron tras un acuerdo con la federación que incluyó eliminar la palabra “femenino” del nombre oficial del equipo nacional.

Un juicio que trasciende el fútbol
El juicio a Rubiales representa un momento clave para el deporte, el feminismo y la justicia en España. Las acciones del expresidente han expuesto no solo fallas institucionales, sino una profunda demanda de cambio en la cultura deportiva.

¿Debe el deporte tener tolerancia cero ante estas conductas? ¿Estamos ante un antes y un después en la lucha por el respeto y la equidad en el fútbol? Comparte tu opinión.