Brasilia, Brasil. – El presidente dominicano Luis Abinader y su homólogo brasileño Luiz Inácio Lula da Silva sostuvieron una reunión bilateral en el marco de la Cumbre Brasil-Caribe, en la cual abordaron la creciente crisis en Haití y la necesidad de una acción conjunta del hemisferio frente al cambio climático, la seguridad alimentaria y la conectividad regional.
Durante el encuentro, Abinader detalló a Lula los esfuerzos que realiza República Dominicana para proteger su seguridad nacional ante el agravamiento de la situación haitiana, y respaldó la propuesta del secretario general de la ONU, António Guterres, para transformar la actual misión de apoyo en Haití en una operación híbrida bajo control de Naciones Unidas.
“La pacificación de Haití es una necesidad estratégica para toda nuestra región. Si fallamos hoy, mañana será más difícil y costoso”, advirtió Abinader ante los líderes del Caribe.
Una cumbre con enfoque estratégico regional
Bajo el lema “Aproximar para Unir”, la cumbre congregó a delegaciones de 16 países del Caribe, incluyendo a los mandatarios de República Dominicana, Guyana, Barbados, Antigua y Barbuda, y el vicepresidente de Cuba, con el objetivo de fortalecer la cooperación regional en temas prioritarios. La crisis haitiana, aunque no estaba formalmente en agenda, ocupó buena parte del debate, dado el deterioro de la situación de seguridad en ese país.
Según cifras de la ONU, más de 2,600 personas han muerto este año como consecuencia de la violencia de bandas armadas, y casi un millón de haitianos se encuentran desplazados internamente.
Cambio climático y pacto hemisférico
El presidente Abinader alertó sobre el impacto del cambio climático en la región, mencionando huracanes extremos, sequías, pérdida de biodiversidad y la proliferación del sargazo, y propuso la creación de un pacto climático hemisférico que combine financiamiento internacional, innovación y cooperación política.
“La amenaza más urgente que enfrentamos es el cambio climático, y sus efectos ya se sienten con fuerza en el Gran Caribe”, señaló.
Asimismo, propuso una transición energética regional, aprovechando los recursos solares, eólicos e hídricos de América Latina y el Caribe, así como un sistema regional de monitoreo del sargazo, con apoyo técnico y científico de Brasil.
Seguridad alimentaria, turismo y conectividad
Abinader también abogó por fortalecer la seguridad alimentaria en el Caribe, citando como ejemplo el Plan Nacional de Soberanía Alimentaria dominicano, e impulsó el comercio intracaribeño de productos agroindustriales.
Además, destacó la urgencia de crear corredores marítimos y aéreos para superar la fragmentación geográfica del Caribe y fomentar el turismo multidestino como motor de desarrollo económico y cultural.
“El Caribe sigue siendo una región de distancias cortas y trayectos largos. Necesitamos una conectividad real”, enfatizó el mandatario.
Invitación a la Cumbre en Punta Cana
En el marco del evento, Abinader extendió una invitación formal a los líderes del Caribe para participar en la décima Cumbre de las Américas, que se celebrará en diciembre en Punta Cana, con énfasis en una agenda hemisférica dinámica que incluya al sector privado como protagonista del desarrollo regional.
Reuniones bilaterales clave
Durante su estadía en Brasilia, el presidente Abinader también sostuvo reuniones con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn; el presidente del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), Sergio Díaz-Granados; y la primera ministra de Barbados, Mia Mottley, con quienes abordó temas de cooperación financiera y situación regional.
Acompañaron al mandatario el canciller Roberto Álvarez y el embajador dominicano en Brasil, Robert Tanaka.
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