Los incendios forestales que azotan el noroeste de Canadá continúan intensificándose y ya han obligado a miles de personas a abandonar sus hogares en las provincias de Saskatchewan, Alberta y Manitoba, mientras las autoridades intentan contener las llamas que amenazan comunidades indígenas, instalaciones petroleras y centros urbanos estratégicos.
En Saskatchewan, el gobierno ordenó este lunes la evacuación inmediata de siete comunidades del grupo indígena Lac La Ronge, ubicadas en la zona norte del territorio. De acuerdo con las autoridades, al menos 8,000 personas han sido desplazadas por los 19 focos de incendio activos en esa región.
“La situación es crítica. Estamos movilizando todos los recursos disponibles para proteger vidas y bienes”, indicó un vocero del servicio de emergencias provincial.
Amenaza a centros petroleros en Alberta
En la provincia de Alberta, donde se concentra buena parte de la industria petrolera del país, los incendios en la región norte han comenzado a afectar infraestructuras estratégicas, forzando la evacuación preventiva de trabajadores en varios complejos de extracción y procesamiento de crudo.
Las autoridades han intensificado las medidas de control ante el riesgo de que las llamas alcancen instalaciones industriales con materiales altamente inflamables, lo que podría agravar la emergencia.
Fin Flon bajo amenaza y evacuaciones masivas en Manitoba
En Manitoba, la situación no es menos preocupante. Las evacuaciones alcanzan ya a unas 20,000 personas, mientras los bomberos luchan por contener el fuego cerca de Fin Flon, una ciudad minera de más de 5,000 habitantes que fue evacuada completamente a finales de la semana pasada cuando el incendio se aproximó a menos de 400 metros del perímetro urbano.
Aunque una leve bajada de temperaturas ha ofrecido cierto alivio temporal a los equipos de emergencia, el Ministerio de Medio Ambiente de Canadá advirtió que el humo sigue representando un riesgo grave para la salud, especialmente para niños, personas mayores y pacientes con afecciones respiratorias.
“Recomendamos a la población limitar su exposición al aire libre y seguir las indicaciones locales”, declaró el organismo en un comunicado oficial.
Persiste la alerta ambiental
Los incendios de esta temporada ya se cuentan entre los más extensos de los últimos años en Canadá, y reflejan la creciente amenaza que representa el cambio climático para las regiones boreales del país. Las autoridades continúan emitiendo alertas por mala calidad del aire, y se espera que las condiciones meteorológicas del martes puedan ofrecer una ventana favorable para avanzar en el control del fuego.
Las labores de evacuación y contención se desarrollan con apoyo de fuerzas federales, equipos aéreos y voluntarios locales, en un esfuerzo coordinado para frenar el avance de las llamas y evitar una tragedia mayor.
Canadá ha declarado estado de emergencia en varias regiones, mientras se prepara para enfrentar una de las temporadas de incendios forestales más agresivas de su historia reciente.
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