Autoridades investigan actos de terrorismo tras explosiones que provocaron descarrilamientos y caos ferroviario
Moscú, Rusia — Al menos siete personas murieron y más de 60 resultaron heridas tras el colapso de dos puentes en las regiones de Briansk y Kursk, al suroeste de Rusia, en incidentes que las autoridades han comenzado a investigar como posibles actos de terrorismo.
El primero de los derrumbes ocurrió la noche del sábado 31 de mayo, cuando un puente colapsó sobre las vías del tren cerca de la localidad de Pilchino-Vygonichi, en Briansk, justo al paso del tren de pasajeros número 86 que viajaba desde Klimov hacia Moscú. Según Ferrocarriles de Moscú, el incidente ocurrió a las 22:44 (hora local) y provocó el descarrilamiento de varios vagones.
La compañía ferroviaria atribuyó el accidente a una “interferencia ilegal en las operaciones de transporte”, mientras que el Comité de Investigación de Rusia confirmó más tarde que el derrumbe fue causado por una explosión.
El gobernador regional Alexander Bogomaz informó que el siniestro dejó siete fallecidos y 69 heridos, incluidos tres niños. Tres de los heridos permanecen en estado crítico, y al menos 44 personas fueron hospitalizadas.
Horas después, un segundo incidente se registró en la región vecina de Kursk. A las 3:00 a.m. del domingo, un puente ferroviario se vino abajo cuando una locomotora cruzaba sobre él en el distrito de Zheleznogorsk. La máquina cayó a la carretera inferior y se incendió, según informó el gobernador interino Alexander Khinshtein. Los maquinistas resultaron heridos y fueron trasladados a centros médicos.
Investigación en curso por terrorismo
Ambos incidentes están siendo tratados oficialmente como actos de terrorismo. “Estas acciones han sido clasificadas como actos de terrorismo”, afirmó Svetlana Petrenko, portavoz del Comité de Investigación, en declaraciones a la agencia estatal RIA.
Videos compartidos en redes sociales muestran escenas del rescate y grandes desprendimientos de escombros cubriendo los vagones del tren. Más de 180 rescatistas y 60 equipos fueron desplegados en Briansk para las labores de emergencia.
Las regiones afectadas —Briansk y Kursk— se encuentran cerca de la frontera con Ucrania, en una zona que ha sido blanco de frecuentes ataques y sabotajes desde el inicio de la ofensiva rusa en 2022. Aunque hasta el momento no se ha vinculado formalmente a ningún grupo o país con los hechos, el patrón coincide con otros casos recientes de sabotaje a infraestructuras ferroviarias en áreas cercanas al conflicto.
Precedentes y condenas
En abril, un joven fue condenado a 14 años de prisión en Volgogrado por incendiar infraestructura ferroviaria, en un acto que describió como proucraniano. Casos similares han resultado en penas de hasta 14 años en regiones como Sarátov.
Las autoridades rusas han reforzado las medidas de seguridad en el sistema de transporte y aseguraron que el resto de los servicios ferroviarios continúa operando con normalidad, mientras se desarrollan las investigaciones para esclarecer lo ocurrido.
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