Quisqueya, RD. – En un acto vandálico, las paredes del Parque Infantil Johan Castro, espacio público de recreación en el municipio Quisqueya, fueron derrumbadas, motivando a la Familia Richardson a desistir de su ampliación tras la oposición de los regidores locales.
La Familia Richardson, quienes en 2015 transformaron un basurero en el único parque infantil del municipio, había planeado invertir 11 millones de pesos para expandir y modernizar el parque. El doctor Pedro Richardson y su esposa, Yovanna Rodríguez, expresaron su decepción: “Estábamos muy entusiasmados de que los niños tuvieran el parque más moderno del Este; sin embargo, cuando las cosas se tornan violentas, lo mejor es preservar la paz”.
La obra de ampliación incluiría un carrusel de 24 plazas, gazebo, área de BBQ, baterías de baños para niños y niñas, una cafetería, caseta para planta eléctrica, oficina, almacén, una figura de 30 pies de Mickey Mouse y esculturas de dinosaurios, jirafas y gorilas. “Lo siento en el alma por los niños. Los invito a que más temprano que tarde pidan cuentas a quienes frustran sus sueños y asesinan su alegría”, declaró Richardson, refiriéndose a la oposición de los regidores.
La Familia Richardson ha estado comprometida con el municipio Quisqueya durante más de veinte años, construyendo una sala de pediatría en el hospital Napoleón Beras, viviendas para familias afectadas por incendios, otorgando becas universitarias, organizando el Parque de Luces anual y aportando a la infraestructura vial con la construcción de aceras y contenes, además de donar pozos y reparar canchas.
El alcalde Carlos Melo y amplios sectores de la comunidad han respaldado a la familia Richardson en su defensa del derecho de los niños a contar con espacios seguros y modernos de esparcimiento. La comunidad lamenta el acto y hace un llamado a las autoridades para apoyar a quienes promueven el desarrollo social y la felicidad de los más jóvenes en el municipio.
